Es el arbusto ideal para jardines pequeños, pero también para aquellos que buscan una planta hermosa y de bajo mantenimiento. el es cuidado de abelia Son muy sencillos, y no requieren grandes conocimientos de jardinería. Pocos requisitos contrastan con un arbusto ornamental ideal para llenar de alegría cualquier espacio. Buena razón por la que es la planta favorita en muchos parques y jardines.
Si nos ceñimos a los pocos cuidados de la abelia, podremos disfrutar de una flor durante meses. Unas gafas perfectas para iluminar no solo cualquier retina sino también cualquier nariz. A la belleza de sus flores, en tonos blancos o rosas, se suma su otro atractivo: su perfume. A delicado aroma muy caracteristico ideal para agregar más personalidad a cualquier espacio, dentro y fuera del hogar. Al crecer por dentro lógicamente no mostrará todo su crecimiento. Pero, sin embargo, nos regalará su bella presencia en dimensiones más que manejables.
Ya sea que le gusten los verdes exuberantes o las flores duraderas, este es el arbusto para usted. Y, con él, basta con saber de abelia care para enamorarse perdidamente de él.
7 CUIDADOS CLAVE PARA ABELIA PARA LAS FLORES
Antes de entrar en detalles sobre los cuidados de abelia, vale la pena obtener información más precisa al respecto. Una de sus cualidades más valiosas es que es un arbusto de hoja perenne. Algo interesante, si queremos disfrutar de algo de vegetación en los meses de invierno. Además, sus hojas tienen forma alargada y un color verde intenso. Dos buenas características para que aunque haga frío podamos tener algo de color en nuestro jardín.
Es muy común plantarla sola o incluso para formar una pared de vegetación. Una función interesante, ya que la abelia crece hasta tres metros de altura pero se extiende con alegría hacia el amplio. Pero, dejando de lado el aspecto práctico, no cabe duda de que el principal atractivo de esta planta son sus flores. Una cabeza con forma de campana que aparece en primavera y nos acompaña hasta principios de otoño. Un auténtico escenario natural, si nos ceñimos al cuidado de la abelia con precisión, podremos disfrutarlo sin interrupciones.

Veamos, entonces, qué cuidados nos permitirán disfrutar de sus flores durante casi medio año.
1. La ubicación, crucial para el crecimiento de abelia
Aunque con otras plantas cabe medio fardo, con la abelia núm. Para que pueda crecer bajo condiciones y florecer al ritmo que normalmente requiere sitio en pleno apogeo. Si vivimos en un clima muy cálido, podemos darle una ubicación de sombra parcial.
Pero si la luz es básica, es casi más otro aspecto. A pesar de su rusticidad, la abelia es un arbusto que no sufras el viento. Por eso es importante plantarla en un lugar resguardado o incluso cerca de una pared que pueda protegerla.
2. El suelo, uno de los cuidados más importantes para abelia
Aunque decíamos que no es una planta exigente, hay uno de los cuidados de la abelia que no podemos pasar por alto. Nos referimos a la tierra en la que está plantada, sobre todo si la tenemos en maceta. La abelia requiere suelo fértil pero con una porcentaje de arena que facilita el drenaje. Algo lógico, ya que sus necesidades de humedad en el sustrato son elevadas en proporción a la intolerancia de sus raíces al encharcamiento.
Es fundamental evitar suelos calcáreos o apelmazados. Una tierra blanda será fundamental para el correcto desarrollo de la planta.
3. La temperatura, fundamental para tu bienestar
La abelia no es un arbusto que tenga problema con las altas temperaturas. Sin embargo, no se puede decir lo mismo de las temperaturas invernales. La tolerancia al frío es baja, por lo que no podemos exponerlo a un frío severo cuando es joven.
La cosa cambia si tenemos una abelia que ya tiene unos años, y ya ha desarrollado tallos leñosos. En este caso, su tolerancia al frío es mayor y puede sobrevivir hasta los -10 grados de temperatura.
4. El abonado, imprescindible en la planta
Otro de los cuidados de la abelia que no se puede perder. Como dijimos antes, este arbusto perenne requiere un suelo fértil. Por lo tanto, su requerimiento nutricional es alto.

Para favorecer el desarrollo tanto de las plantas como de las flores, lo ideal es aplicar un abono orgánico dos momentos muy definidos del año. En la primavera, fortalezca la planta y hágala florecer con salud. Y en otoño, época en la que necesita nutrirse adecuadamente antes de que llegue el fuerte frío.
5. Regar, regularmente en verano
Una de las características más singulares de esta planta. Y es que, a pesar de que es una amante del sustrato ligeramente húmedo, soporta algo de sequia. Algo que nos podría dar una ventaja si nos sorprenden las altas temperaturas fuera de casa o si estamos despistados bajo el agua.
Más allá de esta historia, es el ideal durante los meses cálidos tenemos un patrón de agua regular y abundante. De nuevo: no confundamos agua con inundaciones. Bastará con tocar profundamente el sustrato para ver si pierde humedad antes de que vuelva a dar agua. En los meses de frío, el riego será casi anecdótico.
6. Recortar, solo lo necesario y cada dos años
Si somos estrictos con el cuidado de la abelia, su crecimiento será un espectáculo. Y no tanto en altura sino, sobre todo, en anchura. Para dar forma y limpiar sus ramas, lo ideal es quitar las más viejas cada dos o tres años.
Dado que es un arbusto ornamental de buen tamaño, esta tarea debe hacerse lentamente. Si nos apresuramos, podemos romper la estructura estética de la planta y afear su apariencia general. Y que, como hemos visto en otras ocasiones, los colores y los volúmenes son clave en el paisajismo. Un buen motivo para planificar las ramas que vamos a cortar y, sobre todo, cuánto.
7. Plagas, materia menor
Debido a su increíble resistencia, las plagas no serán uno de los cuidados de abelia que nos quitarán el sueño. Pero en contadas ocasiones o en plantas muy débiles, el pulgón puede afectarla. Algo a nuestro alcance evitar, alimentando la planta en condiciones desde principios de primavera.
Y ahora que ya conoces abelia care, ¿quieres tenerla entre tus plantas? ¡Disfrutarás de un arbusto próspero y agradecido que, a pesar de todo, será hermoso!