
La suspensión no solo proporciona comodidad durante la conducciónsino también para garantizar la seguridad ya que ayudan a controlar el vehículo, especialmente a altas velocidades y durante maniobras peligrosas. De hecho, se consideran uno de los tres componentes esenciales del ‘triángulo de seguridad’, junto con los neumáticos y los frenos. Este artículo explicará qué es las señales indican la necesidad de revisar y posiblemente cambiar la suspensión de su automóvil.
planificación del agua
planificación del agua Provoca una mala adherencia a la calzada en situaciones de lluvia o superficies mojadas. Esto se puede corregir o reducir si la suspensión está en buenas condiciones ya que reduce la formación de una película de agua entre el neumático y la carretera.

Rollo y deslizamiento lateral
Las curvas y los giros cerrados son otras situaciones en las que los conductores deben confiar en una suspensión perfectamente mantenida. Proporcionan más seguridad. En situaciones críticas, es fundamental mantener el control del vehículo y asegurar la posesión de la carretera. arrollado, cambiar de lado y la pérdida de dirección del vehículo se rectifican con mayor eficacia cuando se ha mantenido una suspensión perfecta.

Vibración del volante
como el los amortiguadores son los responsables del buen agarre a la carretera, si están averiados, producen un constante roce del volante y constantes rebotes de las ruedas; esto podría incluso hacer que el automóvil se salga de la carretera. En estos casos el vehículo se comporta de forma imprecisa e inestable. Del mismo modo, una suspensión desgastada se suma al desgaste de otros elementos de la suspensión (barra de resorte y estabilizador), así como otras roturas.
Errores en los Sistemas de Seguridad
Los sistemas de seguridad como TSC y ESP, cuya función es actuar, son actualmente muy utilizados automáticamente en situaciones de inestabilidad del vehículopor ejemplo, perder el control, etc. amortiguadores las condiciones no son las mejores posibles el vehículo no funciona correctamente y por tanto estos sistemas malinterpretan las señales emitidas por el coche.
Desgaste de neumáticos y mayor distancia de frenado
Los neumáticos son otro elemento que se daña debido a un mantenimiento deficiente, lo que provoca un desgaste adicional y reduce la vida útil del neumático en un 20 %. Si un vehículo tiene ambos llantas usadas y la suspensión podría aumentar en 3 metros en la distancia rota desde un punto de reparación de 100 km/h. Es aún más peligroso si el vehículo tiene un sistema de frenos ABS, aumentando la distancia de frenado a otros 5 metros. Esto se debe a que el neumático rebota y salta, provocando una pérdida de contacto con la superficie de la carretera.
Cambiar la suspensión cada 60.000 kilómetros
Los expertos aconsejan en lugar de la suspensión y algunos elementos de suspensión cada 60.000 kilómetros. Las pruebas han demostrado que los amortiguadores y la suspensión en el kit instalado original se deterioran significativamente a los 60 000 km. En muchos vehículos estándar, las características de manejo y la comodidad se pueden mejorar reemplazando estas piezas desgastadas.
Si quieres leer artículos similares a ¿Cuándo debo cambiar la suspensión de mi coche?te recomendamos visitar nuestra categoría de Mantenimiento y Reparación de Autos.
Consejos
- Si notas alguno de estos síntomas te recomendamos acudir a tu mecánico, él es quien más te puede ayudar.