Es una de las plantas al aire libre más atractivo, por sus colores y su valor ornamental. Dos características a las que hay que añadir otra característica básica a elegir: la cuidado de la capuchina Son extremadamente simples y accesibles incluso para aquellos que son nuevos en ellos. cuidar las plantas. Algunos lo compensan cuando esta planta, también conocida como Taco de Reina, exhibe su flor en forma de trompeta en colores amarillo, naranja o rojo. Y no solo son bonitas: además, la Nasturtium es muy generosa y puede estar en flor desde primavera hasta finales de otoño.
Antes de entrar en detalles sobre cómo cuidarlo, vale la pena informarse un poco más sobre el capuchino como se le conoce comúnmente. Aunque estamos más que familiarizados con ella, esta planta Nativo de América Central y del Sur. Hay algunas latitudes muy diferentes a la nuestra que, con algunas precauciones, no impiden su éxito en nuestro clima. Sin embargo, aparte de conocer en profundidad los cuidados del capuchino, es fundamental conocer en profundidad la especie con la que nos encontramos.
Teniendo en cuenta estos aspectos, veremos qué necesita esta planta de rápido crecimiento para desarrollarse y cubrir de naturaleza el espacio donde la plantemos.
CUIDA EL SOMBRERO PARA MANTENERLO FUERTE
Antes de echar un vistazo más de cerca a cómo cultivarlo, exploremos sus características un poco más a fondo. Cuando pensamos en la Capuchina, nos viene a la mente que es una planta que forma parte de la lista de escaladores. Y de hecho: muchos de los más de 80 especies hay de esta planta. Sin embargo, es importante saber que se puede disfrutar de muy diferentes formas: la Capuchina se puede utilizar como planta rastrera, pero también es perfecta si la tenemos colgando.

Además de esto, hay otro aspecto que debemos conocer antes de plantarla entre nuestras plantas. Con el estricto cuidado de la Nasturtium, es muy probable que se produzca un gran desarrollo en poco tiempo. Lo cual no es óbice, siempre y cuando planeemos tu plantación pensando en lo que se puede lograr y sabiendo un detalle: puede ser invasivo. Por eso es importante que no estés rodeado de otras plantas: incluso puedes treparlas en cualquier momento.
¡Pero que esto no sea menos! Puede ser una gran elección si queremos llenar de vida una terraza, el muro de un jardín, o incluso decorar un cenador o una pérgola con naturaleza.
1. La tierra, un detalle en su cultivo
El tipo de sustrato es algo que no debe preocuparnos: la Capuchina es capaz de crecer incluso en suelos pobres. No obstante, y si podemos elegir, lo ideal será plantarla en un sustrato suelto rico en nutrientes, como buen sustrato universal.

Pero, más importante que esto, sí proporcionarle un drenaje muy efectivo. La Capuchina no es amiga de las inundaciones, por lo que tendremos que llevar este aspecto al extremo para evitar que se pudran sus raíces.
2. El sitio, esencialmente bajo el cuidado de los capuchinos
Es, sin duda, una de las tareas del capuchino que tenemos que mimar. Y es que, aunque admite estar en semisombra, no es su espacio natural. Para que nuestra planta crezca como esperábamos, pero sobre todo para que sea fructífera, será necesario sembrarla en plantas. posición de pleno sol.
Pero ojo: si vivimos en un clima muy caluroso en los meses de verano, demasiado sol puede dañar la planta. En este caso, será ideal plantarla en semisombra.
3. El riego, una característica exigente en los meses de verano
Un error común sobre el cuidado de la Capuchina es pensar que es uno de los plantas resistentes a la sequía. Una afirmación que no es del todo cierta, y que debemos considerar con muchos matices. Si bien es cierto que aguanta cortos periodos sin agua, lo cierto es que siempre requiere que el sustrato esté ligeramente húmedo durante los meses de floración. Lo cual lograremos con riesgos constantes y moderados.
Sin embargo, y con la llegada del otoño, la propia planta te indicará que es el momento de dejar de regar. ¿Como? hojas amarillas Será su forma de indicarnos que está entrando en reposo vegetativo y por tanto no necesita agua.
4. Los fertilizantes, una ayuda importante durante la época de floración
Para que nuestra Capuchina sea generosa con sus flores, es importante una dosis regular abono en los meses de floración. Para ello, nada como utilizar un abono líquido para plantas de flor diluido en el agua de riego una vez al mes.

Con el final del verano, no está de más aplicar humus de lombriz basado en nuestra planta. Una forma de sostenerlo de forma continuada en el tiempo en los meses previos al descanso vegetativo.
5. La temperatura, aspecto a vigilar
Esa es, sin duda, la mayor precaución que debemos tener en el cultivo de la Capuchina. Hablamos de una planta que, por su origen, es enorme. Se resiente cuando baja la temperatura y requiere un cuidado extra en los meses fríos. Además de hacer un triturado Para proteger sus raíces, no está de más cubrirlo con una manta protectora de jardín.
Importante: no tolera las heladas ni temperaturas por debajo de un grado bajo cero.
6. Recortar, una tarea de la que podemos olvidarnos
¡No lo necesitas! En realidad, bastará con quitar las ramas y las hojas secas o amarillas. Además, también es importante eliminar las flores dañadas.
7. Plagas, algo a vigilar de cerca
Por sus características, es una planta muy atractiva para plagas como el pulgón. Threat, aunque nos obliga a mantener bajo control a nuestra capuchina, tiene otra lectura positiva: es una planta maravillosa si tenemos en cuenta Cómo iniciar un jardín orgánico. Apuntado por este diminuto insecto, su presencia entre nuestros cultivos puede impedirles ver nuestra fruta.

Pero más allá del jardín, es importante frenar cualquier plaga de pulgón en nuestra planta con algún insecticida. Debido a su velocidad de propagación, es más probable que colonice nuestra Capuchina en un corto período de tiempo.
Como ves, el cuidado de la Capuchina es sumamente sencillo y lo compensa en gran medida con su belleza. Imposible no confiar en ella para llenar de vida y color cualquier espacio.